¿Cómo te sientes con el estreno de El que sabem en la capital?
Tenía muchas ganas de venir a Madrid y ver cómo funcionaba la película, porque El que sabem al ser una película en valenciano solo la había visto estrenarse en Valencia, Palma de Mallorca y Barcelona. De momento habíamos jugado un poco en casa en lo que se refiere a estrenos a pesar del recorrido internacional, pero tenía ganas de ver cómo se recibía en la capital y estoy muy contento con la bienvenida.
¿Cómo te enfrentaste al personaje de Martí y cómo encontraste la forma de darle vida junto a Jordi Núñez?
El personaje me vino a través de un casting al que optaron muchas personas y finalmente fui elegido para ser Martí. Yo previamente conocía a Jordi, sabía que quería currar conmigo de alguna manera, pero no sabíamos cómo, y dio la casualidad de que finalmente la vida nos juntó en este proyecto, ha sido todo un regalo. La manera de enfocarlo fue muy sencilla porque Jordi y yo somos los dos de Valencia, de la comarca de Huerta Sur, él es de Pinedo y yo de Alacuás, compartimos muchos referentes e imaginarios y fue muy sencillo construir el personaje de Martí, dentro de la complejidad que implica encargar un verbo que no es el tuyo.
Es complicado meterse dentro de un personaje, ¿en qué momento te sentiste a gusto dentro del personaje?
La película se grabó en tres actos, el tercer acto fue lo primero que grabamos, después rodamos el primero y por último el segundo, y ese orden se estableció por nuestras edades. En el momento en el que sentí que por fin me había encontrado dentro de mi personaje fue en el primer acto, es decir lo segundo que grabamos. Ya llevábamos unos días de rodaje, nos conocíamos entre nosotros y encima ese acto me permitía también jugar dentro de todo este imaginario compartido con Jordi que he comentado porque Martí habla desde una juventud y frescura que luego vemos que va perdiendo conforme crece. Fue muy divertido tener esa alegría y esa chispa de juventud que te da Martí en el primer acto y me sentí muy cerca de él.
Llevas una chaqueta impresionante, se nota un estilo muy personal tanto fuera como dentro de la pantalla. Cuéntame, ¿te implicaste en el vestuario para la creación del personaje?
En el caso de la peli el vestuario es magnífico y es todo gracias a Alex de la Zona que hizo un curro genial. Yo ahí no dije nada, lo que me ponían iba a misa porque confiaba en su gusto y representa de una forma muy palpable lo que es Martí. Por otra parte, me hace mucha ilusión que me digas que te guste lo que llevo, porque es una chaqueta de un diseñador valenciano emergente que me está ayudando mucho en la promoción de la película, y que además está haciendo unas cosas de otro planeta. Ha estado Clec Fashion Festival, un festival de moda que se ha llevado haciendo unos años en Valencia y se llama Modistilla (@modistilla_official). Me encantaría que se le diera el reconocimiento que merece y se le siguiera en las redes sociales porque es una pasada todo lo que hace, es color, fiesta, fantasía y mola mucho.
La película se rodó a finales de 2021, estuvisteis juntos en una misma casa y se rodó todo en tres fases, ¿hubo mucha unión entre el equipo? ¿cómo preparasteis los ensayos?
Nos conocimos durante el Teaser durante el 2020. La película se iba a grabar antes, pero llegó una pandemia que nadie esperaba y esto lejos de jugar en nuestra contra acabó jugando a nuestro favor a nivel interpretativo. En cuanto a producción no sé cómo fue el tema, pero este tiempo nos dio la oportunidad de conocernos más, de poder establecer una relación más íntima entre nosotros y fue algo que ayudó de cara al resultado final. Posteriormente durante el rodaje se formó un ambiente muy especial porque a pesar de que estábamos en un momento muy complicado vivimos en una especie de burbuja en la que de repente todo lo que estaba pasando no tenía cabida. Nos convertimos en una pequeña familia.
Tu personaje tiene una amistad muy especial con Carla, ¿cómo trabajasteis esa confianza y amistad entre Nakarey y tú para que pareciese tan real?
Realmente construimos la relación desde el texto, en base al guion que Jordi nos había dado. Trabajamos mucho con él y nos dejamos guiar y aconsejar todo el rato. También establecimos nuestros propios códigos entre Nakarey y yo y luego también con Javi y con Tania, creándose unos lazos de manera muy natural. No hubo un plan meticuloso que consistía en hacerlo de una forma concreta, sino que todo fue surgiendo porque estábamos al servicio de la película y ésta nos estaba dando todo lo que necesitábamos para crear estos vínculos.
¿Cuál fue tu momento favorito mientras estabais rodando?
Mi momento favorito fue cuando rodamos la escena de la fiesta con Samantha Hudson cuando estábamos a unos pocos días de que nos pusieran el toque de queda. Fue muy divertido poder hacer eso y nos divertimos mucho entre nosotros y sobre todo con Samantha Hudson que fue un honor trabajar con ella. Fue un momento distópico porque estábamos en un espacio en el que nadie tenía la oportunidad de estar y encima al límite de que toda la normativa cambiase por lo que no cambiaría ese recuerdo por nada.
¿Hubo alguna anécdota curiosa?
Sí, hubo varias, por ejemplo, todas las escenas de verano en el chalet de Martí, se rodaron en octubre. Imagínate, estábamos en la sierra de Valencia y nos estábamos metiendo en un rio y en una piscina cuando hacía 11 grados. Hacia muchísimo frío y nos teníamos que meter en el agua fingiendo que hacía mucho calor y que era genial estar allí, aunque la realidad era que queríamos salir corriendo de allí.
¿Qué es lo que te llevas de Martí? ¿hay algo que te ha calado en tu persona?
Uff, que pregunta más difícil porque me la hago constantemente. Creo que me he llevado muchas cosas buenas de este personaje, pero, sobre todo, me llevado muchas cosas de la película en general. Siento que mi manera de ver las relaciones interpersonales ha cambiado profundamente y ahora intento en determinadas situaciones salir de mi propio cuerpo y poder ver desde fuera la situación y las diversas maneras de actuar de las personas y mirarlas sin juzgar. Por ejemplo, en la película como espectador una situación que Mauro lo vería como una cabronada no lo es tanto y esto que Mauro que haría para otro es una cabronada. Realmente es un acto de amor el ser consciente del abanico tan amplio que es las emociones del ser humano y que cada uno actúa dependiendo de sus circunstancias, y creo que esto es lo que me lo quedo de El que saben, porque es un aprendizaje de empatía muy bonito.
¿Te hace feliz rodar en valenciano? ¿Cómo lo viviste eso?
Me hizo absolutamente muy feliz, porque soy valenciano parlante, es mi lengua y yo además soy un defensor ferviente de la lengua, creo que hay que cuidarla y respetarla. Para mi trabajar en mi idioma es super importante igual que podría trabajar en castellano que también es mi lengua, pero hacerlo en un idioma que normalmente no se ve en pantalla para mí ha sido bastante emocionante.
Nos ha encantado verte en el personaje de Mauro, pero esperamos muchos proyectos más, ¿nos puedes adelantar alguno de tus próximos proyectos?
Tenemos algunos proyectos entre manos, pero no puedo decir mucho, y sé que suena como algo muy típico, pero lo único que puedo adelantar es que tengo algunos proyectos en Valencia y es algo que me gusta mucho, trabajar en mi tierra y ver como prospera a nivel audiovisual porque realmente creo que tenemos muchas historias que contar.
