El acontecimiento: La cuenta atrás, el paso adelante
El acontecimiento
Próximos estrenos España 18 de marzo
Título original
- L'événement
- Año
- 2021
- Duración
- 100 min.
- País
- Francia
- Dirección
- Guion
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Audrey Diwan, Marcia Romano. Novela: Annie Ernaux
- Música
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Evgueni Galperine, Sacha Galperine
- Fotografía
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Laurent Tangy
- Reparto
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Anamaria Vartolomei, Sandrine Bonnaire, Luàna Bajrami, Pio Marmai, Anna Mouglalis, Kacey Mottet Klein, Louise Chevillotte, Fabrizio Rongione, Leonor Oberson, Louise Orry-Diquéro
- Productora
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France 3 Cinéma, Rectangle Productions, Srab Films
- Género
- Drama | Años 60. Maternidad
- Sinopsis
- Francia, 1963. Anne, una joven y brillante estudiante con un futuro prometedor, descubre que está embarazada. De la noche a la mañana ve truncada la oportunidad de terminar sus estudios y huir de las asfixiantes restricciones de su entorno. Con los exámenes finales acercándose y un vientre que no para de crecer, Anne decide actuar, incluso si supone confrontar la vergüenza, el dolor y hasta ir a la cárcel por ello.
- CRÍTICA
Cuando uno observa los palmareses de los festivales y premios de cine recientes, se puede constatar que, indiscutiblemente, estos se han feminizado reconociendo a más cineastas mujeres con el premio gordo y acentuando también el reparto en otras categorías. Nunca antes en el mismo año las mejores películas en Cannes, Berlín, Venecia, San Sebastián o los Oscar (y algunos otros certámenes más) habían sido realizada por distintas directoras, pero parece ser que el techo de cristal empieza a romperse para compensar estos casi 130 años de ninguneos generales y puntuales alegrías hacia las profesionales del sector.
No cabe duda de que estas recompensas tienen un componente político -¿hay algo que esté totalmente desposeído de ello?-, pero es justo admitir que todas las películas premiadas hacen méritos, poseen una voz propia y no se encajonan en un mismo género o estilo. La decisión de otorgar el León de Oro en Venecia este pasado año a El acontecimiento no solo sirve para apoyar un feroz alegato feminista, sino también para dar crédito a una experiencia fílmica desasosegante repleta de verdad. Una combinación de factores que solidifican un veredicto que, a día de hoy, sigue siendo necesario hasta que la balanza no se equilibre.
El acontecimiento adapta la novela semiautobiográfica de Annie Ernaux acerca del embarazo no deseado de una prometedora estudiante universitaria y las dificultades que tiene para abortar en la Francia de los años 60. Aunque la película se sitúa en un tiempo y un lugar concretos, el contexto social es rebajado en comparación con otras visiones más marcadas como la indispensable 4 meses, 3 semanas y 2 días (Cristian Mungiu, 2007), pero esto sirve para extrapolar la complicada situación a otros países en la misma época, e incluso para reflejarse en un presente en el que las condiciones para interrumpir una gestación voluntariamente son igualmente indecentes o ilegales.
Y no hace falta irse a países en desarrollo, en la misma Europa hay estados que no amparan el aborto debidamente, véase Andorra por ejemplo, por no mencionar los incontables doctores que priorizan la objeción de conciencia –anclada en ideologías retrógradas-, a la voluntad y seguridad de las pacientes.
Audrey Diwan, en su segunda película, es consciente de la pesadilla que supone este “acontecimiento” para cualquier persona y apuesta por filmar una cinta asfixiante a varios niveles, desde la presión del entorno de la protagonista hasta la agonizante vivencia que centra el tema. Por este motivo, pega la cámara a la cabeza y al cuerpo de la joven, una Anamaria Vartolomei entregadísima que fluctúa naturalmente entre la fortaleza y la vulnerabilidad en un tour de force para quitarse el sombrero; mientras que se fía al plano cerrado y a los seguimientos con el fin de remarcar la soledad que conlleva la circunstancia y potenciar la inmersión exasperante.
Como si se tratara de un vertiginoso thriller, “cada segundo cuenta”, y Diwan es capaz de trasladar una ansiedad equiparable a partir de un tempo reposado pero conciso, sin florituras ni efectismos sensacionalistas. Porque, ante todo, El acontecimiento es directa.
La cineasta también efectúa un estudio del cuerpo femenino, al cual no le queda otro remedio que infligir dolor y exponer al peligro para, paradójicamente, seguir viviendo y no arruinarse la existencia. Porque esto ha sido una constante para las mujeres a lo largo de los siglos que sigue aún vigente, fruto de unas convenciones legitimadas por un sistema heteropatriarcal violento y nada empático.
Hasta que no dejen de morir mujeres por ello –ya sea directamente o por causas derivadas como puede ser la intolerancia del ambiente- y no exista un sistema garantista que asegure la plena libertad de decisión sin represalias de ningún tipo, nunca estará de más que se sigan testimoniando, aunque sea mediante la ficción, estas realidades tan crudas. Y aun mejor si, además, se lleva a cabo con filmes que te agarran la mano con tanto poder como el que nos ocupa.