Capone: Los fantasmas del pasado
Capone
Filmin (últ. incorporaciones) 16 de abril
Título original
- Capone aka
- Año
- 2020
- Duración
- 103 min.
- País
- Canadá
- Dirección
- Guion
-
Josh Trank
- Música
-
El -P
- Fotografía
-
Peter Deming
- Reparto
-
Tom Hardy, Linda Cardellini, Kyle MacLachlan, Matt Dillon, Jack Lowden, Kathrine Narducci, Gino Cafarelli, Noel Fisher, Al Sapienza, Matilda Del Toro, Wayne Pére, Mason Guccione, Sue-Lynn Ansari, ver 7 más
- Productora
- Co-production Canadá-Estados Unidos;
Bron Studios, Addictive Pictures, Creative Wealth Media Finance, Lawrence Bender Productions, Band Apart
- Género
- Drama | Biográfico. Mafia. Drama carcelario. Años 40. Años 30
- Sinopsis
- Tras pasar 10 años en prisión, el gánster Al Capone, de 47 años, comienza a sufrir de demencia y su mente comienza a ser acosada por los recuerdos de su violento pasado.
- CRÍTICA DE DANIEL BERNAL
A lo largo de la Historia del cine, grandes iconos de la actuación han encarnado al más famoso de los gángsters americanos, el comúnmente conocido como Al Capone, desde Hans Rehman en Pánico en Chicago, pasando por Al Pacino en El precio del poder, hasta Robert de Niro en Los Intocables de Eliot Ness. Y no solo estos, han sido muchos los que se han puesto en la carne de este mafioso sin escrúpulos, tocándole ahora el turno a Tom Hardy, a quien esta vez, sí que le vemos el rostro.
Josh Trank nos presenta al Al Capone más terrorífico a la par que desdeñable, pues esta película sobre su último año de vida es tan irrelevante que es de extrañar que se haya producido. Al comienzo, en el primer encuadre, observamos una hermosa fotografía, dándonos la sensación de que vamos a presenciar algo grande; todo lo contrario, de hecho la pulida fotografía que observamos en esta cinta donde destaca un humor grotesco y soez es de lo poco destacable de este perecedero conjunto.
Se desaprovecha enormemente el magnífico elenco con el que cuenta Capone. Y es que teniendo en el reparto a un suntuoso Tom Hardy y al mítico Kyle MacLachlan, actor fetiche de David Lynch, es un pecado no haber construido una historia a medida para ellos. Estos en particular y todos los actores que se ven en pantalla en general se encuentran perdidos en medio de un laberinto donde no se sabe por dónde ir, y por mucho que se esfuercen en su intento, no hallan salida en este rocambolesco dédalo.