CRÍTICA DE CINE

Magaluf Ghost Town

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Magaluf Ghost Town

Cartelera España 26 de noviembre

Título original

Magaluf Ghost Town
Año
Duración
93 min.
País
 España
Dirección

Miguel Ángel Blanca

Guion

Miguel Ángel Blanca

Música

Sara Fontán

Fotografía

Raúl Cuevas

Reparto
Documental
Productora

Boogaloo Films, Little Big Story, Mosaic Producciones

Género
Documental
Sinopsis
Cosas extrañas están pasando en la costa balear: el olor a orina y sangre, coches de policía y ambulancias que recorren las calles sin que nadie preste atención... Cada año, un millón de turistas ocupan las calles de Magaluf durante el verano. Invaden el espacio público y lo transforman en un parque temático donde todo está permitido. En el Twin Peaks balear, los residentes viven en una absurda tensión diaria entre un ambiente abominable y un verdadero placer vacacional. Magaluf se convierte en una manifestación muy específica del paradigma y la vida del turismo europeo low cost.
 
CRÍTICA

La segunda propuesta es un documental dirigido por Miguel Ángel Blanca. Magaluf es una ciudad costera del sur de Mallorca; Magaluf es un destino privilegiado para el turismo de borrachera y sexo. Este verano, el nombre de Magaluf ha aparecido en los telediarios como escenario de fiestas salvajes y botellones en plena pandemia sobre todo en Punta Balena, la calle principal “llena de olor a sangre y orina”.

Magaluf se ha definido como “una  suerte de holocausto zombie del balconing y el mamading, del turismo etílico low cost y las despedidas de soltero que acaban en comisaría”. Magaluf es una ciudad fantasma durante el día y buena parte del año. El director define Magaluf Ghost Town como “el retrato coral de una comunidad durante las temporadas baja y alta, desde un tono de misterio cercano al thriller pero sin perder de vista la comedia costumbrista, mezclando documental y ficción”.

Sobre ese fondo de turistas borrachos, de suicidas que se matan haciendo balconing, de sexo desenfrenado, hay otras vidas: las de los habitantes de Magaluf que intentan sobrevivir en medio del infierno en que el turismo low cost ha convertido su ciudad. El documental, sigamos llamándole así, aunque en realidad no es ni mucho menos un documental clásico, sigue a cinco personas ajenas al caos que destruye su entorno.

Tere, cocinera andaluza, gorda y con problemas de salud, está acostumbrada a encontrarse basura, vómitos y sangre en las piscinas de los hoteles en los que trabaja. Para sobrevivir, Tere alquila una habitación a Cheikne, un inmigrante de Mali con un doble trabajo, en la construcción de día y en los lavabos de una discoteca de noche.

En otro espacio de la ciudad, Ruben, un guapo adolescente gitano y homosexual, inventor de una leyenda urbana mitológica en torno a Magaluf, recorre la ciudad y sus costas con su mejor amigo, el hijo del dueño de un bar donde ha venido a trabajar ese verano. Al margen de ellos, está Irina, una contratista rusa dispuesta a transformar la costa de Mallorca en un gran parque temático de ladrillo y golf para turistas ricos, un infierno rich cost tan despreciable como el low cost.

Los cinco son las figuras visibles en un escenario poblado de fantasmas. Inquietante y terrorífico, el humor, la ternura con la que están tratados sus personajes y una cierta mirada no condenatoria ni inquisidora respecto a una realidad que no se puede obviar, hacen de este magnífico trabajo un film altamente recomendable.