Un novio para mi mujer: Un manual que no peca de rancio
Un novio para mi mujer
Próximos estrenos España 22 de julio
Título original
- Un novio para mi mujer
- Año
- 2022
- Duración
- 92 min.
- País
- España
- Dirección
- Guion
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Pol Cortecans, Laura Mañá. Historia original: Pablo Solarz
- Música
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Alfred Tapscott
- Fotografía
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Sergi Gallardo
- Reparto
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Belén Cuesta, Hugo Silva, Diego Martín, Joaquín Reyes, Eric Masip, Àngela Cervantes
- Productora
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Arcadia Motion Pictures, Athos Pictures, Institut Català de les Empreses Culturals, ICAA
- Género
- Comedia | Remake
- Sinopsis
- Diego quiere separarse de su mujer, Lucía, pero no sabe cómo decírselo. Está harto de sus neuras y sus quejas constantes, y hace tiempo que ha perdido la chispa que le enamoró. Incapaz de decírselo a la cara, recurre al Cuervo Flores, un afamado seductor “de los de antes”, que intentará enamorar a Lucía para que sea ella quien termine con su matrimonio.
Dentro de la variopinta filmografía como cineasta de Laura Mañá, Un novio para mi mujer curiosamente se erige como un título que es casi una síntesis de los elementos que más han proliferado en su carrera.
En la película, se aúna la comedia, el género que más ha tocado, y un personaje femenino fuerte, una tipología bien presente en las ancianas de La vida empieza hoy (2010) o los diferentes biopics televisivos sobre mujeres icónicas como Clara Campoamor, Frederica Montseny o Concepción Arenal. Este compendio de las inquietudes se instala en la romcom, de nuevo tras la floja Te quiero imbécil (2020), en esta ocasión no cayendo en discursos conservadores y ofreciendo un producto más sofisticado a todos los niveles.
Mañá readapta la película homónima de Juan Taratuto de 2008 y la actualiza a las sensibilidades de hoy en día, brindando una comedia de manual, efectiva, resolutiva y suficientemente divertida para pasar el sofocante calor. Y es tan justo admitir que algunas situaciones no llegan tan lejos como podrían llegar, especialmente aquellas que involucran a Hugo Silva –un personaje del que bien se merecía excavar más capas-, como también reconocer que hay bastantes gags que funcionan y unos diálogos que, en su sencillez, no sonrojan, bastante para una película de este tipo.
Obviamente, si la ligereza del conjunto toma cuerpo es gracias a un reparto notable, capitaneado por una Belén Cuesta demostrando (otra vez) la razón por la que es una de las mejores actrices del género en España, regalándonos un registro arisco que pocas veces habíamos podido apreciar. A su lado, el infravalorado desde los tiempos de Aquí no hay quien viva Diego Martín, cumpliendo y dando entidad a su papel de cobarde indeciso; mientras que Silva despliega su probada vis cómica, casi autoparodiándose en sus papeles de rudo galán de finales de los dosmiles.
Y vehiculado correctamente a través de su entretenimiento, tiene espacio para poner en valor la importancia de la salud mental diaria y cuidarse a uno mismo, en esa sintonía con las preocupaciones candentes en la sociedad actual, haciendo de ella una propuesta mejor de lo que parece a simple vista.
Coherente con su mensaje, a pesar de en el último minuto restarle convicción para abrir la esperanza de los románticos empedernidos, Un novio para mi mujer es un granizado refrescante que hasta sacia algo más que la sed. Un claro caso donde el póster no hace justicia.