CRÍTICA DE CINE

Piedra Noche

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Piedra noche

Próximos estrenos España 17 de junio

Título original

Piedra noche
Año
Duración
87 min.
País
 Argentina
Dirección

Iván Fund

Guion

Martín Felipe Castagnet, Iván Fund, Santiago Loza

Música

Francisco Cerdán

Fotografía

Gustavo Schiaffino

Reparto

Mara BestelliAlfredo CastroMarcelo SubiottoMaricel ÁlvarezJeremías Kuharo

Productora
Coproducción Argentina-Chile-España; 

Rita Cine, Insomnia Films, Globo Rojo Films, Nephilim Producciones, INCAA

Género
DramaFantástico | FamiliaMonstruos
Sinopsis
Sina viaja a la costa para acompañar a su amiga Greta en la venta de su casa de veraneo. Hace menos de un año Greta perdió a su único hijo en ese mar y necesita su ayuda. Mientras embalan todo y se preparan para entregar la llave, Bruno, el esposo de Greta, dice haber visto algo que confirma los rumores de los lugareños sobre la aparición de una extraña criatura. 
 
CRÍTICA

El duelo como eje temático vertebral de historias es recurrente. A modo de octavilla pedagógica, el cine hace que te identifiques con personajes en una situación de reticente olvido, un estadio psicológico en el que las vicisitudes de la vida nos colocan en algún momento. El cine es edificante en tanto que trata de representar la complejidad emocional humana en momentos de dificultad, y, con propósito regeneracionista, procurar mecanismos para superarlos.

            Piedra Noche muestra una casa, en la costa, donde vive un matrimonio, Greta y Bruno. Estos reciben la visita de Sina, amiga de Greta, que decide acompañarles un tiempo, mientras la pareja procura un comprador para la casa. Están viviendo momentos de profunda tristeza y desconcierto, desde que perdieron a su hijo engullido por el mar. En el pueblo, todo el mundo se hace eco de avistamientos de una extraña criatura marina que ha reavivado el turismo en la zona. Bruno empieza a creer que estos rumores, que esta bestia, puede ser alguna fuente de respuesta.

          

  La película aspira a ser un drama con tintes fantásticos, y es en esta tendencia hacia el cine de género dónde consigue las más altas cotas formales. Hay una atmósfera densa, inspiradora, que parece de todo menos realista. Un trémulo espiritismo en el que es probable, incluso previsible, que un ser acuático de naturaleza fantástica emerja de entre las aguas.

Los apesadumbrados protagonistas deambulan buscando un asilo emocional, en un proceso que en términos dramáticos carece de fuerza. Es, sin embargo, la adopción del discurso indirecto libre la herramienta narrativa más eficaz: adoptamos de manera directa la visión subjetiva de los personajes, algo que posibilita la identificación, lo que, en términos edificadores, legitima el relato.

Por otra parte, esta subjetivación hace verosímil la fantasía, resulta lo explicativa que la película no parece ser, a la vez que desvirtúa esa aura que con tanto virtuosismo se empeña el film en construir.

Así, Piedra Noche es críptica en sus formas narrativas, poco aclaratoria, que saca partido de la mitología marina, de lo imposible, como subterfugio emocional para el duelo.