La piel quemada: Cine y emigración

La aparición de este auténtico libro de referencia sobre como el séptimo arte ha tratado el conflicto de los refugiados a través de los años no puede ser más oportuna. Si escuchamos cualquier noticiario nos llevamos las manos a la cabeza al observar la involución a la que el ser humano se ha abonado, y allá donde se deberían haber aplicado soluciones se siguen multiplicando los problemas.

Y hablamos de libro de referencia porque el autor, Eduardo Moyano, se ha encomendado la ardua tarea de enumerar cuantos trabajos, a nivel mundial, se han dedicado a retratar esta polémica desde casi todos los puntos de vista y geográficos posibles: la emigración interior española; la emigración exterior; el exilio; los nuevos emigrantes que llegan a nuestro país,; los fenómenos migratorios históricos en todo el mundo…todo tratado de forma muy amena y sobre todo con una sobreabundancia de datos que invita al lector a prorrogar el placer de su lectura anotando películas, actores, directores y libros de referencia sobre el tema.

A tal efecto, se resuelven imprescindibles los apéndices con los que concluye cada exhaustivo capítulo en el que se acompaña la ficha técnica y artística, un pequeño comentario, una valoración crítica y el lugar donde se puede hallar actualmente  cada película que se ha ido citando, un elemento de ayuda muy apreciable para todos aquéllos que quieran profundizar un poco más en una temática tan rica e interesante como poco explorada.

El título del libro hace referencia a una mítica película española que en el momento de su estreno pasó sin pena ni gloria pero que con el paso de los años ha ido ganando una fama de merecido culto al radiografiar de manera entomológica como era la sociedad española allá por los primeros sesenta, una época en la que muchos andaluces y extremeños se vieron obligados a emigrar a Cataluña ante la situación de miseria y pobreza que padecían. En el capítulo referido exclusivamente a esta maravillosa película a reivindicar desde ya también encontramos una jugosa entrevista que el autor hizo al director de La Piel Quemada, Josep Maria Forn. En ella se cuenta, entre otras lindezas, como se intentó boicotear el estreno de la película en Madrid de una forma harto peculiar, o como los siguientes proyectos del realizador se vieron directamente afectados por la repercusión que tuvo su obra magna.

A parte de esta entrevista, también podemos encontrar salpicada entre anécdotas y acontecimientos históricos otras opiniones de valía en formato ”interview” que aportan una riqueza extraordinaria y actúan de complemento ideal a la labor empírica del investigador, destacando entre ellas la realizada a Daría Esteva, hija de Luis E. Parés, director de la película Notas sobre la emigración. España 1960 o a Roberto Bodegas, director de Españolas en París.

La cantidad ingente de títulos que aparecen en el libro nos pueden hacer llegar pensar en la dificultad a la hora de afrontar el reto de componer un mosaico general que abarque todos y cada uno de los movimientos y procesos migratorios acaecidos durante la historia. Pero el autor es lo suficientemente inteligente para abordar la tarea desde una vertiente lúdica para nada engolada y teórica. El libro se devora con fruición y sirve para darnos cuenta de cómo el cine no es mero entretenimiento, sino que existen una serie de cineastas comprometidos con la realidad que utilizan su cámara para captar momentos fundamentales de nuestra vida y que están pidiendo a gritos que se les de toda la visibilidad posible.