Way Down: Continúa la fiebre por los atracos perfectos
Way Down
Próximos estrenos España 12 de noviembre
Título original
- Way Down aka
- Año
- 2021
- Duración
- 118 min.
- País
- España
- Dirección
- Guion
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Rowan Athale, Michel Gaztambide, Andrés Koppel, Rafa Martínez, Borja Glez. Santaolalla
- Música
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Arnau Bataller
- Fotografía
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Daniel Aranyo
- Reparto
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Freddie Highmore, Astrid Bergès-Frisbey, José Coronado, Liam Cunningham, Luis Tosar, Famke Janssen, Sam Riley, Emilio Gutiérrez Caba, Axel Stein, Hunter Tremayne, Julius Cotter, James Giblin, Craig Stevenson, Daniel Holguín
- Productora
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Telecinco Cinema, Think Studio, Mediaset España, Movistar+. Distribuidora: Sony Pictures España
- Género
- Thriller. Acción | Robos & Atracos
- Sinopsis
- La leyenda de que el Banco de España es inexpugnable y no se puede atracar no asusta a Thom Johnson (Freddie Highmore), el brillante y joven ingeniero reclutado para averiguar cómo acceder a su interior. El objetivo es un pequeño tesoro que va a estar depositado en el banco solo diez días. Diez días para descubrir el secreto de la caja, diez días para urdir un plan, diez días para preparar el asalto, diez días para aprovecharse de un plan de fuga irrepetible, cuando la esperada final del Mundial de Fútbol de Sudáfrica reúna a cientos de miles de aficionados a las puertas del propoi Banco. Diez días para alcanzar la gloria… o para acabar en prisión.
- CRÍTICA
Todos recordamos la adaptación de Ocean’s Eleven de 2001, que trajo aire fresco al cine de atracos imposibles, en los que te sentabas durante unas dos horas a observar como un equipo de personajes arquetípicos hacían los preparativos para llevarse un botín sin que ni el “malo” de turno ni el espectador se enteraran. No es muy imprudente afirmar que el lenguaje y la narrativa de esa película (En mi opinión bastante mejor que su homónima de 1960) crearon cierta escuela y que la sombra de aquel blockbuster es alargada.
En 2017 recibimos un nuevo soplo de aire fresco de esa fórmula ya un tanto manida. La Casa de Papel apareció en formato de serie en España y revolucionó de nuevo la fiebre por los atracos perfectos. Mas adelante y Netflix mediante, se expandió por otros países y difundió esa obsesión, mezclada quizá, con esa aura de exotismo con el que parecen vernos en el extranjero.
Way Down sigue, hoy, dando síntomas de esa fiebre por los grandes robos, y si bien es una producción española, está también pensada mirando hacia fuera. La receta es tan bien conocida por todos que, después de que un periodista preguntara en el preestreno la duración de la película, el encargado de la sala respondió: “Dos horas, como todas”. Y es que así es, el cine comercial occidental se ha estandarizado hasta tal punto que se puede asumir aquello de “vista una, vistas todas”.
Lo que nos queda como apasionados del cine es, básicamente ver la misma historia una y otra vez e intentar apreciar las pequeñas diferencias que hacen de cada propuesta algo único. En este sentido, Way Down cuenta con algunas muy buenas ideas. El primer y principal punto a favor de la obra se llama Luis Tosar. La segunda buena idea a mi juicio es la de inventar una caja fuerte decimonónica que yace en sótano del Banco de España y que funciona parecido a una balanza, de tal modo que, si alguien entra dentro, se inunda de agua hasta ahogar a los intrusos. El tercer acierto es encuadrar toda la trama en julio de 2010. Para los que vivimos con pasión aquel Mundial de Sudáfrica en persona, es imposible no tener los pelos de punta en algunas secuencias.
Al margen de estas tres grandes fortalezas poco hay de novedoso en la fórmula. A parte de Tosar, tenemos a José Coronado (A quién últimamente se le esta atragantando el papel de policía quemado). Por otro lado, el reparto cuenta con Freddie Highmore, Sam Riley, Framke Janssen o Liam Cunnigham, que, si bien sus nombres pueden no sonarnos mucho, sus caras si lo hacen y son actores muy capaces, aunque estemos acostumbrados a verlos en segunda fila en otras producciones.
La dirección corre a cuenta de Jaume Balagueró conocido por cine de terror y sobre todo por la mítica saga de Rec iniciada en 2007. En mi opinión nada o casi nada que objetar al apartado visual y sonoro: la película resulta muy entretenida y agradable de ver y se nota que se cuentan con buenos medios y criterios estéticos. Quizá se echa algo de menos un poco más de estilo “español” en el resultado final, si es que tal cosa existe. A la vista está que no hay película comercial que se escape a la homogeneización de géneros y narrativas.
¿Merece la pena verla? Por supuesto que sí, es cierto que dura dos horas como todas, pero ello no quita que sea un buen entretenimiento. Marvel ha basado su éxito en repetir infinitas veces la misma fórmula y casi siempre hay algún aporte nuevo en cada entrega, si uno está abierto a disfrutar del cine comercial. Además, que yo sepa, en ninguna película de Marvel sale Luis Tosar, en esta sí.