X: Vamos a rodar una porno
X
X
- Año
- 2022
- Duración
- 105 min.
- País
- Estados Unidos
- Dirección
- Guion
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Ti West
- Música
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Tyler Bates, Chelsea Wolfe
- Fotografía
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Eliot Rockett
- Reparto
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Jenna Ortega, Brittany Snow, Mia Goth, Kid Cudi, Martin Henderson, Owen Campbell, Stephen Ure, Geoff Dolan, James Gaylyn, Simon Prast
- Productora
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A24, Bron Studios, MAD SOLAR
- Género
- Terror | Años 70. Cine dentro del cine. Sexualidad y pornografía
- Sinopsis
- En 1979, un grupo de jóvenes cineastas se propusieron hacer una película para adultos en la zona rural de Texas, pero cuando sus anfitriones solitarios y ancianos los atrapan en el acto, el elenco pronto se encuentra en una lucha desesperada por sus vidas.
- CRÍTICA
La industria pornográfica no tiende a innovar ni recrearse en sus proyectos. El guion, al fin y al cabo, es un mero salvoconducto para llegar a un destino que siempre es el mismo. Y tampoco se van a poner a descubrir la panacea estéticamente, pues el cuestionable consumidor de estos productos no va a ir a ver si está ante el nuevo Kubrick o Tarkovsky. No obstante, el filmmaker del rodaje que nos atañe en X quiere reformular los paradigmas de esta industria para demostrar que se puede hacer “cine de verdad”.
Y mientras que transcurre la historia y el carismático grupo protagonista intenta filmar su prometedora idea en una granja texana, Ti West da clases de dirección: juega con diferentes formatos y géneros –desde la esencia grindhouse hasta el estilo más exploitation pasando por el slasher más buenamente creepy–, con un solo travelling nos presenta personajes y situaciones diferentes –esto sucede con relativa frecuencia dentro del filme–, maneja el ritmo y la intriga de manera punzante, como si se tratase del bueno de Lynch –la atmósfera de su arranque nos transportará a Blue Velvet– y recrea toda la narrativa propia del terror haciéndola suya, como ha hecho toda su vida, aunque con diferentes géneros, el maestro Tarantino, quien aquí estará muy presente, tanto por la personalidad y carisma que derrocha todo el elenco protagónico como por su ingeniosa e impudorosa dialéctica.
Pero una de las cosas más interesantes –además de la realización– que se esconde detrás de la que está llamada a ser la más plausible y disfrutable cinta de terror del año es su fondo, pues entre tanto deleite y fervor y tanta sensualidad y excitación se encuentra un ejercicio de espejismos entre la eterna juventud y la cruel vejez. Porque no hay nada más aterrador que anhelar tu belleza pasada, encontrarte más cerca de despedirte de la vida que de gozarla.
Y de ahí que nos adentremos en un estado de perturbación y enajenación mental. X es como si Lynch y el Tarantino más "deathproofiano" hubiesen viajado a la América profunda para rodar una classic-comedy-horror-pornographyc-slasher movie y arrancarnos los ojos con el mejor de los bisturís.