No es ningún secreto que muchos estadounidenses están hartos de los excesos de Wall Street y sus juegos de azar de futuros financieros. Y es que es muy difícil explicarle a quien ha perdido sus ahorros que algunos especuladores obtuvieron beneficio gracias a la galopante crisis que todavía planea en nuestra sociedad.
Con el recuerdo reciente de la muy interesante La gran apuesta (The Big Short, Adam Mckey, 2015) ahora nos llega la película Money Monster, dirigida por otro estrellón hollywoodiense como es Jodie Foster, que va un paso más allá y plantea una situación extrema que llevará a reflexionar a más de uno sobre los límites de la responsabilidad y la venganza para los pocos que han jugado con la esperanza e ilusiones de muchos.
En este thriller cargado de tensión, Lee Gates (George Clooney) es una grandilocuente figura televisiva cuyo popular programa de economía lo ha convertido en el genio del dinero de Wall Street. Pero, después de recomendar un valor tecnológico que se desploma misteriosamente, un airado inversor (Jack O’Connell) toma como rehenes en directo a Gates, a su equipo y a su productora estrella Patty Fenn (Julia Roberts).
Con un desarrollo de la acción en tiempo real, Gates y Fenn deberán encontrar una forma de seguir con vida, a la vez que descubrirán la verdad que se esconde tras una densa maraña de grandes mentiras.
Jodie Foster ha confesado en alguna entrevista previa al estreno que en esta ocasión los dos máximos protagonistas de la cinta (Clooney y Roberts) no han coincidido en ningún momento del rodaje, sobre todo porque la actriz tuvo que actuar casi todo el rato sin oposición.
El reparto se completa con una pléyade de intérpretes británicos de reconocida solvencia en el mundo de la actuación: Caitriona Balfe (Outlander); Dominic West (The Affair) y el ya citado Jack O´Connell (Invencible) entre ellos.
