Ruido
Ruido
Netflix (estrenos destacados) 11 de enero
Título original
- Ruido
- Año
- 2022
- Duración
- 104 min.
- País
- México
- Dirección
- Guion
-
Natalia Beristain, Diego Enrique Osorno, Alo Valenzuela Escobedo
- Música
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Pablo Chemor
- Fotografía
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Dariela Ludlow
- Reparto
- Compañías
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Woo Films, Agencia Bengala. Distribuidora: Netflix
- Género
- Drama | Basado en hechos reales
- Sinopsis
- Julia es una madre, o mejor dicho, una de las muchas madres, hermanas, hijas, colegas, que han visto sus vidas destrozadas por la violencia generalizada en un país que libra una guerra contra sus mujeres. Julia busca a Ger, su hija. Y en su búsqueda, irá tejiendo las historias y luchas de las diferentes mujeres que conocerá.
- CRÍTICA
Quisiera que al acabar la función las lágrimas se fueran, pero la impotencia sigue ahí.
Al acabar una película normalmente la historia termina. Sales del cine y vuelves a tu vida normal sabiendo que lo que viste es ficción, y aunque Ruido lo es, expone perfectamente una realidad terrible que se vive día con día en México y refleja un sentir colectivo de impunidad que ojalá se acabara al terminar la función.
Nos encontramos con Julia, una mujer que tras nueve meses buscando a su hija desaparecida es llamada a reconocer un cadáver que resulta ser que no es el de ella, todo fue una confusión burocrática. Así, impulsada por el enojo ante el ineficiente sistema de justicia que no cumple con su deber, emprende ella un viaje lleno de incertidumbres para intentar encontrarla.
De esta manera se encuentra metida en un espiral de corrupción, narcotráfico, redes de trata coludidas con la policía y un sinfín de obstáculos más que desenmascaran el lado más oscuro del sistema, pero que también, para fortuna de Julia, la pondrán en el camino de ciertas personas dispuestas a ayudarla.
Escribir sobre este tipo de películas es difícil porque verlas lo es también. Es conectarte con el sentimiento de miles de personas que en la vida real pasan por situaciones similares y en donde las dudas son más que las certezas. Para lograr esto, Julieta Egurrola (Julia) nos regala una actuación absolutamente memorable digna de mención.
La película comienza tratando el tema del duelo, pero ante la esperanza que surge de volver a ver a su hija, el filme poco a poco se convierte en una especie de historia de suspenso donde no quieres despegar los ojos de la pantalla. Pero ojo, esto es importantísimo, el tema es tratado con mucho respeto, sin amarillismos o espectáculo y se agradece ante la delicadeza del tema.
Si bien nos encontramos ante una película que cumple perfectamente con lo que se propone, cabe comentar que la edición no es la mejor: hay escenas innecesarias, incluso cuando el final se siente corto. Asimismo, el último tramo no está del todo bien aprovechado ya que la transición de la experiencia individual de la protagonista al sentir colectivo no causa el mismo impacto –por ejemplo el discurso tan plano en la manifestación–, lo cual es una lástima porque hay imágenes bellísimas.
En conclusión, una película que clasificamos como obligatoria para entender una realidad ante la cual no podemos seguir cerrando los ojos. Gracias Natalia Beristáin.