Adiós, señor Haffmann: El dinero corrompe
Adiós, señor Haffmann
Título original
- Adieu Monsieur Haffmann
- Año
- 2021
- Duración
- 115 min.
- País
- Francia
- Dirección
- Guion
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Fred Cavayé, Sarah Kaminsky. Diálogos: Fred Cavayé, Sarah Kaminsky. Obra: Jean-Philippe Daguerre
- Música
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Christophe Julien
- Fotografía
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Denis Rouden
- Reparto
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Daniel Auteuil, Gilles Lellouche, Sara Giraudeau, Nikolai Kinski, Anne Coesens, Mathilde Bisson, Claudette Walker, Frans Boyer, Vivien Tarragon
- Productora
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Vendôme Production, Daï Daï Films, Pathé, Orange Studio, France 2 Cinema, Belga Productions, OCS, France Télévision, La Banque Postale Image 13, Cinéaxe 2, Cinémage 15, Indéfilms 9, La Banque Postale Image 14
- Género
- Drama | Años 40
- Sinopsis
- París, 1942. François Mercier es un hombre corriente que solo aspira a formar una familia con la mujer que ama, Blanche. También es el empleado de un talentoso joyero, el señor Haffmann. Pero ante la ocupación alemana, los dos hombres no tendrán más remedio que concluir un acuerdo cuyas consecuencias, a lo largo de los meses, alterarán el destino de nuestros tres personajes.
“Adiós, señor Haffmann” nos sitúa en el París ocupado por los nazis en 1942. Allí, un talentoso y rico joyero judío se ve obligado a escapar de la ciudad ante la inseguridad y el clima opresivo que está empezando a promover la ocupación alemana. Haffman propondrá un sencillo arreglo a uno de sus amables y fieles empleados, François Mercier, consistente en realizar una falsa venta en la que él le cederá su negocio y casa con la intención de poder recuperarla en un futuro de forma sencilla.
Tras enviar a su familia fuera de peligro, Haffman no consigue salir de la ciudad por los rigurosos controles que hay, viéndose obligados a volver a su casa y tener que vivir de forma clandestina en el sótano. La relación entre Haffmann y Mercier no tardará en resentirse…
El director francés Fred Cavayé (“El juego”) toma este interesante punto de partida para crear una especie de cuento moral en la que asistiremos a la historia de un hombre que es incapaz de conformarse con lo que tiene y que poco a poco se va perdiendo en su propia avaricia. “Adiós, señor Haffmann” podría considerarse una versión moderna y más oscura del cuento de la lechera, contando también con un protagonista que se distrae con sus pensamientos de grandeza y sus sueños de gloria.
No obstante, “Adiós, señor Haffmann” es una película que trata muchos más temas y que ofrece además un retrato muy interesante sobre la necesidad de poder y sobre ese lado oscuro que todos tenemos. La cinta también nos muestra el clima opresivo ante el que muchos judíos en París tuvieron que enfrentarse y que también estaba lleno de envidias y rencillas pasadas.
Gilles Lellouche (“Pequeñas mentiras para estar juntos”) está formidable dando vida a un hombre que poco a poco a se va corrompiendo ante las perspectivas de dinero y poder, dejando de lado a su mujer, amigos, y sobre todo su moralidad. Le acompaña en la actuación el veterano Daniel Auteuil, (La belle époque) que aporta en contraposición un personaje lleno de dignidad y moralidad que sabe aguantar todos los problemas de la vida con serenidad y firmeza. Un hombre que a la postre es el gran protagonista de una película que realiza una crítica muy interesante sobre el poder del dinero y la necesidad que tenemos todo de grandeza y de ser respetados.