Romance | 94 min. | Gran Bretaña-Irlanda 2016
Título: Amor y Amistad.
Título original: Love and Friendship.
Director: Whit Stillman.
Guión: Whit Stillman (Novela: Jane Austen).
Actores: BKate Beckinsale, Chloe Sevigny, Xavier Samuel, Stephen Fry.
Estreno en España: 18/11/2016
Productora: Blinder Films / Chic Films / Revolver Amsterdam
Distribuidora: Avalon.
Sinopsis
Año 1790. La joven viuda Lady Susan Vernon acude a la hacienda de su familia política, con la intención de acallar los rumores acerca de su vida personal y sus flirteos en la élite social. Mientras está viviendo allí, decide buscarse un marido para ella y para su hija Federica, aunque la joven es reacia al matrimonio.
Crítica
Estamos ante una de esas coproducciones donde dada la cantidad de países que han aportado su granito de arena en forma de montante económico ( a saber: Holanda, Francia, Reino Unido, Irlanda y EEUU) sería muy sencillo que todo hubiera acabado deslabazándose y yéndose de las manos a los distintos responsables (en los títulos de crédito se pueden llegar a contar hasta catorce productores distintos).
Pero resulta que muy al contrario, nos hallamos ante una pequeña pieza de cámara rigurosa y concebida desde un confeso amor hacia el original: la novela corta epistolar titulada Lady Susan, escrita por la celebérrima autora británica Jane Austen en 1794 y publicada de manera póstuma en 1871.
El encargado de llevar a buen puerto esta elegante adaptación ha sido el realizador norteamericano With Stillman, quien ya hacía un lustro que no se ponía tras las cámaras tras el relativo fracaso de público y crítica que supuso su último trabajo: la prescindible Damiselas en apuros. Aquí también hace las veces de guionista y lo cierto es que estamos ante una apuesta a contracorriente en la que los aspectos positivos superan con creces a los negativos. Por supuesto las constantes que hicieron de Austen una de las escritoras más populares de la época se pueden apreciar de manera diáfana en Lady Susan, y así los personajes principales de la peripecia cruzan sentidos, sensibilidades, orgullos y prejuicios varios.
Susan es una mujer decidida y enérgica (magnífica Kate Beckinsale, una actriz que es capaz de plasmar en pantalla tanto personajes puros y duros, como el de Selene en la saga Inframundo, como delicados y sutiles como el que ahora nos ocupa) que buscará de manera enconada salir de la precaria situación económica en la que se ha visto inmersa tras su viudez, aunque para ello tenga que remover Roma con Santiago (en este caso Londres con Churchill) para encontrar marido tanto para ella como para su hija adolescente Frederica (interpretada por la emergente Morfydd Clark, vista en Orgullo+ prejuicio+ zombies). ¿Y qué mejor manera de alcanzar su objetivo que esgrimiendo a diestro y siniestro sus inefables armas de mujer enamorando y rompiendo corazones a un ritmo endiablado?.
El meollo del asunto es el de ver como Susan serpentea entre las altas esferas victorianas con ardides propios de la baja estofa, ayudada por una amiga americana a quien da vida la siempre magnífica Cloe Sevigny. ¿Y que mejor compañía para sus astutas correrías que una banda sonora de ensueño?. El soundtrack de Amor y amistad es simplemente espectacular, una recopilación de grandes piezas de música clásica que van de Mozart a Handel pasando por Purcell o el mismísimo Beethoven y que harían las delicias de cualquier megalómano convencido. Con ecos de la música de El Vientre del arquitecto de Peter Greenaway, el compositor francés Benajmin Esdraffo también nos regala una auténtica delicia para los oídos.
Del resto del elenco actoral que acompaña a los protagonistas vale la pena destacar la siempre imponente presencia de un grande de la actuación como Stephen Fry, al que secundan actores menos conocidos para el gran público como Tom Bennett, Jenn Murray o Xavier Samuel, todos ellos con ocasión de lucirse gracias a la excelente dirección artística del film. Puede que el problema más importante que pueda tener el espectador a la hora de atacar esta propuesta sea el de que se utilice un lenguaje que pueda ser demasiado académico; pero una vez superado ese escollo, y si te gustan las intrigas tipo Amistades peligrosas o La edad de la inocencia desde luego no debes dejar pasar la ocasión de ir a verla.