La maldición de Lake Manor

“La maldición de Lake Manor” es por encima de todo un tenebroso cuento gótico. Esta producción italiana, debut en la dirección de Roberto de Feo, posee una impecable factura técnica y juega con todos los elementos del cine clásico de terror.  
La cinta nos sumerge en un angustioso relato en el que un chico parapléjico vive aislado en una oscura mansión. Su madre hace todo lo posible por alejarle de la civilización y el niño ha recibido órdenes de no abandonar nunca la casa, por lo que se siente seguro pero muy frustrado y oprimido. Todo cambiará cuando conoce a Denise, una ayudante adolescente que le ayuda a cambiar su punto de vista sobre la relación que le une con su madre y con el mundo.

La película juega muy bien con la oscuridad y nos sumerge en una historia que nunca llega a dejar claro en qué momento histórico se encuentra. Si no fuera por los coches y por que al protagonista le regalan un ipod, podría ser perfectamente una historia ambientada en la época victoriana. Roberto de Feo plaga el relato de pequeñas pistas y sucesos macabros que pueden ayudar a ir entendiendo el relato, si bien el espectador nunca tendrá la certeza absoluta de qué es realmente lo que está pasando en la casa. Es una película que busca ocultar su propia trama y que prefiere potenciar su narrativa gótica. Finalmente, aunque el desenlace es algo fallido, la sensaciones son más positivas que negativas.

“La maldición de Lake Manor” es una película bien dirigida con un reparto encabezado por unos convincentes Francesca Cavallin y Justin Alexander Korovkin. Juntos construyen un cuento en el que lo más interesante es la ambientación y el suspense que acecha en casa esquina. Es indudable que la cinta busca apoyarse en el cine de terror clásico, con una estructura que nos remite hacia otra época y hacia otra forma de entender el suspense. También son muchos los paralelismos e inspiración respecto a “El bosque”, de M. Shyamalan, aunque sin duda su gran referente es la literatura de Lovecraft.

Es por eso que a la hora de valorar “La maldición de Lake Manor” no importe tanto su historia sino todo la ambientación que la rodea.  Su desenlace es anecdótico y previsible, pero el viaje que nos propone resulta muy estimulante. Roberto de Feo ha construido un cuento gótico que nos sumerge en un mundo asfixiante, lleno de secretos, intrigas y sobre todo de misterios.