Simmons conoció a Sam en los años setenta. De hecho, estuvo en el rodaje de Quiero la cabeza de Alfredo García e incluso aparece como extra en una escena (es uno de los matones del cacique que muere al final: Simmons recuerda en el libro cómo se pasó días enteros de rodaje tumbado en el suelo, sin hacer nada, lleno de sangre... así se las gastaba el viejo Sam).
Decíamos en el comentario del libro escrito por Carlos F. Heredero que aquél era el libro sobre la obra de Sam. Pues bien, el de Garner Simmons es el complemento perfecto a aquella lectura, porque éste es el libro sobre la vida de Sam y, como su título indica, la suya fue una vida salvaje.
Simmons conoció a Sam en los años setenta. De hecho, estuvo en el rodaje de Quiero la cabeza de Alfredo García e incluso aparece como extra en una escena (es uno de los matones del cacique que muere al final: Simmons recuerda en el libro cómo se pasó días enteros de rodaje tumbado en el suelo, sin hacer nada, lleno de sangre... así se las gastaba el viejo Sam).
De este conocimiento surge un libro lleno de anécdotas y declaraciones del propio Peckinpah y también de quienes le rodearon. Un libro que resulta muy fácil de leer, casi como una novela, porque la vida de Sam está tan llena de anécdotas curiosas que uno piensa por momentos que aquello tiene que ser inventado.
Pero no, los testimonios de actores, técnicos, productores, músicos y la propia familia de Peckinpah, demuestran que lo dicho es cierto, por muy fantasioso que pueda resultar en ocasiones. Y que el temperamento de Sam era realmente de película.
Con un material recogido a lo largo de los años, el trabajo de Simmons se centra sobre todo en ordenar tanta información, de ahí su título original A portrait in montage, que alude tanto al trabajo de edición de las distintas entrevistas recogidas como al hecho de que el libro era en su momento (recordemos, fue editado por primera vez en 1983) un retrato en marcha, que aún estaba haciéndose, sobre un autor todavía vivo.
Pero no fue fácil publicar este retrato, porque a Simmons le costó ocho años encontrar un editor que se atreviera a publicar la biografía de un mito de los setenta venido a menos, un mito en cuya existencia el alcohol y las drogas se dan la mano con pasmosa facilidad. Al final pudo editarlo casi casi coincidiendo con la muerte del director. Veinte años después vino esta revisión mejorada en lengua inglesa y, ahora, nos llega por fin la primera traducción al castellano.
Entrando de lleno en la estructura del libro, se trata de una biografía organizada cronológicamente, en quince capítulos vinculados cada uno de ellos a una película de Sam, excepto los tres primeros, que hablan de sus orígenes (Una herencia californiana), su juventud y su paso por el ejército (Crecer), y su entrada en el mundo del espectáculo a través del cine y la televisión (Aprender un oficio).
A partir de aquí, cada capítulo se centra en una de sus películas, recogiendo declaraciones de las personas que participaron en ella, intercaladas con las del propio director y, en ocasiones, aportaciones de Simmons. Del cruce de declaraciones puede extraerse conclusiones muy significativas acerca de la forma de trabajar de Sam, de su manera de ser y de su ideología. A veces, estas declaraciones sirven para aumentar la aureola mítica del cineasta (la multitud de despidos en algunos de sus rodajes, como el de La balada de Cable Hogue); en otras, sirven para demostrar que el mito va más allá de la realidad, que fue muy distinta a la que hoy se recuerda (el rodaje y las sucesivas versiones de Mayor Dundee). En las demás, en definitiva, aportan luz sobre el resultado final de alguna obra maestra (Grupo salvaje).
Ahora bien, si alguien espera encontrar en este libro un análisis de su obra, que se olvide. No hay nada de eso aquí. Simmons no es un crítico de cine (o, al menos, no pretende serlo en este caso), no analiza, simplemente expone datos. De ahí que para este cronista, Sam Peckinpah, vida salvaje de Garner Simmons sea el complemento perfecto de Sam Peckinpah de Carlos F. Heredero: dos libros que sirven para conocer la vida y la obra de uno de los grandes cineastas de los sesenta y los setenta del siglo pasado.
Afortunadamente, el homenaje realizado en el Festival Internacional de Cine de Las Palmas en el año 2007 permitió recuperar esta joya imprescindible para quienes quieren acercarse a la vida de Sam.
Escribe Mr. Kaplan
Sam Peckinpah, vida salvaje | Garner Simmons | T & B editores | ISBN: 978-84-96576-37-7 | Nueva edición: Madrid, 2011
De este conocimiento surge un libro lleno de anécdotas y declaraciones del propio Peckinpah y también de quienes le rodearon. Un libro que resulta muy fácil de leer, casi como una novela, porque la vida de Sam está tan llena de anécdotas curiosas que uno piensa por momentos que aquello tiene que ser inventado.
Pero no, los testimonios de actores, técnicos, productores, músicos y la propia familia de Peckinpah, demuestran que lo dicho es cierto, por muy fantasioso que pueda resultar en ocasiones. Y que el temperamento de Sam era realmente de película.
Con un material recogido a lo largo de los años, el trabajo de Simmons se centra sobre todo en ordenar tanta información, de ahí su título original A portrait in montage, que alude tanto al trabajo de edición de las distintas entrevistas recogidas como al hecho de que el libro era en su momento (recordemos, fue editado por primera vez en 1983) un retrato en marcha, que aún estaba haciéndose, sobre un autor todavía vivo.
Pero no fue fácil publicar este retrato, porque a Simmons le costó ocho años encontrar un editor que se atreviera a publicar la biografía de un mito de los setenta venido a menos, un mito en cuya existencia el alcohol y las drogas se dan la mano con pasmosa facilidad. Al final pudo editarlo casi casi coincidiendo con la muerte del director. Veinte años después vino esta revisión mejorada en lengua inglesa y, ahora, nos llega por fin la primera traducción al castellano.
Entrando de lleno en la estructura del libro, se trata de una biografía organizada cronológicamente, en quince capítulos vinculados cada uno de ellos a una película de Sam, excepto los tres primeros, que hablan de sus orígenes (Una herencia californiana), su juventud y su paso por el ejército (Crecer), y su entrada en el mundo del espectáculo a través del cine y la televisión (Aprender un oficio).
A partir de aquí, cada capítulo se centra en una de sus películas, recogiendo declaraciones de las personas que participaron en ella, intercaladas con las del propio director y, en ocasiones, aportaciones de Simmons. Del cruce de declaraciones puede extraerse conclusiones muy significativas acerca de la forma de trabajar de Sam, de su manera de ser y de su ideología. A veces, estas declaraciones sirven para aumentar la aureola mítica del cineasta (la multitud de despidos en algunos de sus rodajes, como el de La balada de Cable Hogue); en otras, sirven para demostrar que el mito va más allá de la realidad, que fue muy distinta a la que hoy se recuerda (el rodaje y las sucesivas versiones de Mayor Dundee). En las demás, en definitiva, aportan luz sobre el resultado final de alguna obra maestra (Grupo salvaje).
Ahora bien, si alguien espera encontrar en este libro un análisis de su obra, que se olvide. No hay nada de eso aquí. Simmons no es un crítico de cine (o, al menos, no pretende serlo en este caso), no analiza, simplemente expone datos. De ahí que para este cronista, Sam Peckinpah, vida salvaje de Garner Simmons sea el complemento perfecto de Sam Peckinpah de Carlos F. Heredero: dos libros que sirven para conocer la vida y la obra de uno de los grandes cineastas de los sesenta y los setenta del siglo pasado.
Afortunadamente, el homenaje realizado en el Festival Internacional de Cine de Las Palmas en el año 2007 permitió recuperar esta joya imprescindible para quienes quieren acercarse a la vida de Sam.
Escribe Mr. Kaplan Revista Encadenados
Sam Peckinpah, vida salvaje | Garner Simmons | T & B editores | ISBN: 978-84-96576-37-7 | Nueva edición: Madrid, 2011
