Americana Film Festival. Festival Cinema Nordamericà Independent de Barcelona

Redacción 1 de marzo de 2017, 12:32

Con una recepción espectacular por parte de la crítica nos llega Certain Women. Una abogada que tiene una difícil relación con un cliente, una mujer que pretende ganar dinero por métodos poco elegantes y una cuidadora de caballos que se enamora de su profesora. Tres pequeñas historias, de cuatro mujeres, en el imponente estado de Montana. Tres historias de las que desconocemos el contexto, que se nos presentan fragmentadas, sin inicio ni final, mínimas, casi anecdóticas, que están a punto de difuminarse. Pero que calan hasta las entrañas. Calan los personajes, frágiles, tan desdibujados como potentes. Calan en la película y aún más en la reconstrucción a la que se nos obliga. Calan en los espacios, los aromas, la tierra, las soledades, las vidas a las que se nos permite asomarnos casi como si fuésemos espías de una intimidad secreta. Una película que encuentra la poesía de la cotidianeidad en las cosas más pequeñas, más efímeras.

Kelly Reichardt es una vieja conocida de nuestro festival ya que hace dos ediciones presentamos su anterior trabajo, Night Moves. En Certain Women se acompaña de un enorme reparto femenino en el que destacan Laura Dern, Kristen Stewart y Michelle Williams, una actriz habitual en su cine. La película ha recibido nominaciones tan importantes como la de mejor dirección en los Independent Spirit Awards y figura en muchos listados entre las mejores películas del año, como en el prestigioso top de la revista Sight & Sound.

Closet Monster tiene el honor de ser la primera película canadiense de Americana. Óscar es un adolescente que arrastra dos traumas desde la infancia: haber visto una brutal agresión a un chico por el solo hecho de ser homosexual y la separación poco amistosa de sus padres. Creativo y solitario hace pruebas de maquillaje con una amiga, con la que mantiene una incierta relación, con la aspiración de estudiar cine en una escuela de Nueva York y su mejor amigo es un hámster que le acompaña desde su infancia (a quien pone voz Isabella Rossellini). Un día, intentando adaptarse a un nuevo trabajo que detesta conoce a Wilder, un chico enigmático del que duda si se ha enamorado. A partir de entonces su vida pasa a ser más complicada y Óscar mirará de encontrar su identidad y su destino, mientras la relación con sus padres entra en una fase de extrema complicación.

Closet Monster es el primer largometraje de Stephen Dunn y ha ganado premios en Melbourne, Miami o Toronto. Dejaos atrapar por esta historia imaginativa, emotiva, de iniciación, de adolescencia, traumas soledades y paisajes. Un debut muy destacable de un director que seguro, dará mucho de qué hablar.

Una de las sensaciones de TOPS, que no dejará a nadie indiferente será Goat. Una noche, al salir de una fiesta, Brad recibe una fuerte paliza por parte de unos ladrones. Con secuelas físicas pero sobre todo psicológicas, pronto deberá enfrentarse a otro reto. Empieza la universidad y querrá entrar en la fraternidad a la que pertenece su hermano Brett, que se caracteriza por unas pruebas de ingreso muy salvajes y humillantes. Pero Brad se quiere demostrar a sí mismo que es un chico duro y además, quiere pertenecer a un grupo que lo pueda defender de futuros actos de violencia contra él. La presión que recibirán los dos hermanos, uno como parte de las víctimas y otro como parte de los verdugos, pondrá a prueba su relación y su dignidad. Violenta, con mucha testosterona,Goat nos atrapará en su mundo de tensión y nos zarandeará el ánimo. Una película dirigida con un pulso enorme.

Cine indie pensado para un público amplio sin renunciar a la dureza de su historia.

Apadrinada por James Franco, unos de los productores que además se reserva un breve pero intenso papel y con un guión en el que participa David Gordon Green (director de cintas como Prince Avalanche o Joe) y con un reparto de lleno jóvenes promeses en el que destaca Nick Jonas (de los Jonas Brothers),Goat llega a Americana tras su paso por festivales como Sundance o Berlín.

James White da nombre al título de la cuarta película de TOPS, un joven que no parece tener una vida fácil. No se nos explica nada de su pasado ni de su carácter. Pero los momentos que se nos muestran de él denotan que es un poco extremo, violento, con facilidad para los excesos. Cuando muere su padre, con quien había perdido la relación, un familiar le dice “siempre pensamos que acabarías en la cárcel”. Pero no. James intenta afrontar como puede su carácter y el hecho de tener que cuidar a su madre, enferma de cáncer. Pero la última recaída de la mujer llevará su fragilidad al límite. Solo, sin familia que le apoye, con la única ayuda de un amigo y una chica con la que comparte su vida desde hace muy poco, James tendrá que enfrentarse a sus infiernos y a los infiernos de la enfermedad de su madre. Quizás demasiado para él. Aunque a veces, los aparentemente débiles son verdaderamente los más fuertes.

James White es una cinta claustrofóbica, de tensión latente, con un par de personajes al límite excepcionalmente interpretados por Christopher Abbott y Cynthia Nixon. Estuvo nominada como mejor ópera prima en los Independent Spirit Awards y ha ganado premios en festivales tan prestigiosos como Locarno o Sundance, además de figurar en el top ten de los mejores films independientes del 2015 de la National Board of Review.En TOPS también tenemos una comedia. Se trata de Joshy. Un grupo de amigos alquila una casa, con meses de antelación, para celebrar una despedida de soltero. Pero cuando llega el día, las circunstancias de la boda han cambiado radicalmente. Como no les devuelven el dinero y con la idea de encontrarse y hablar sobre lo sucedido, deciden quedar igualmente y aprovechar el fin de semana. Pero las cosas no están para muchas fiestas y por la casa irán pasando diversos personajes, todos arrastrando sus problemas, sus tristezas. El resultado será una comedia muy agridulce, incluso con enormes dosis de patetismo, sobre la amistad, la pérdida y el papel que los amigos juegan en nuestras vidas. El fin de semana pasará, entre risas y llantos, fiestas y chicas. Después continuará la vida.

Joshy es la evolución lógica que ha llevado a cabo el movimiento que nació en los inicios de la década pasada y que se bautizó como mumblecore.

En las películas claves de aquel inicio como Funny Ha Ha o Hannah Take The Stars se trataban historias mínimas, con estética granulosa y actores susurrando. Ahora la dirección es mucho más profesional y las actuaciones son impecables. Lo que queda es la sensación de grupo de amigos haciendo una película (en ésta salen habituales como Aubrey Plaza o Joe Swanberg, además del director Alex Ross Perry en un papel muy jugoso) y la filosofía, que consiste en que a partir de pequeños detalles, aparentemente poco trascendentes, se traten temas personales y generacionales de hondo calado. Joshy lo consigue con contundencia.

Una de las cintas indies que más dado de que hablar durante el último año ha sido Swiss Army Man. Hank (Paul Dano) está harto de vivir solo en una isla desierta. Está por quitarse la vida, cuando repentinamente aparece lo que parece un cadáver empujado por la marea (Daniel Radcliffe). Pero unas violentas flatulencias hacen sospechar a Hank que su nuevo compañero no está del todo muerto. Aferrándose a su compañía empezará una historia de amistad, de amor, entre los dos náufragos. Con un imaginario visual mágico y artesano, unas interpretaciones fantásticas, una música emotiva y un guión sensible que aporta mucho más de lo que en un principio podría parecer, Swiss Army Man se convierte en una de las joyas del año, un original cuento fantástico sobre la soledad y las formas que tenemos de salir adelante.

Dan Kwan y Daniel Scheinert, directores de Swiss Army Man (que firman como Daniels), ya estuvieron presentes el año pasado en nuestro festival con su maravilloso corto Interesting Ball. La intuición de entonces se ha convertido en realidad. Empezaron ganando el premio a la mejor dirección por un film dramático en el festival de Sundance y desde entonces la cinta no para de recoger premios y nominaciones, destacando la de mejor película y actor (Radcliffe) en el Festival de Sitges 2016 o las nominaciones a mejor primera película en los Independent Spirit Awards de este año.

Y en TOPS no podía faltar Wiener-Dog. Un padre de familia adinerada compra un perro salchicha a su hijo, que se recupera de una enfermedad, para darle un capricho y una mascota que llene el espacio que tanto la madre (Julie Delpy) como él son incapaces de ocupar. Pero la falta de sensibilidad hacia la nueva mascota hará que los problemas aumenten. Por causas del destino, el perro cambiará de manos y su nueva jefa (Greta Gerwig) tampoco tendrá muy claro que hacer con él. Es una chica solitaria que emprende un viaje sin destino con un chico drogadicto (Kieran Culkin) al que acaba de conocer. Será el inicio de los diversos cambios de manos en la vida del perro salchicha. Una pareja con síndrome de down, un profesor que es la burla de sus alumnos (Danny DeVito) o una solitaria y adinerada mujer enferma (Ellen Burstyn) formarán parte de este mosaico que Todd Solondz utilizará para desplegar su mala leche habitual y hacer una comedia sin concesiones, otorgando a sus personajes el patetismo habitual de su cine.

Todd Solondz es uno de los directores más reconocidos y más personales de los últimos años en el cine indie americano. Con dos títulos tan importantes en los inicios de su filmografía como Welcome to the Dollhouse y Happiness, el director americano ha seguido cargando sin compasión contra sus personajes, con un humor cínico y brutal en cintas como Storytelling, Palindromes, Life During Wartime o la por desgracia todavía inédita en los cines de nuestro paísDark Horse. Con Wiener-Dog vuelve a la primera línea con un reparto coral de lujo. Wiener-Dog ha ganado premios importantes en el Festival de Deauville y ha pasado por festivales del prestigio de Sundace, Seattle o San Sebastián.

Para finalizar TOPS uno de los platos fuertes del festival: Christine. ¿Qué tipo de persona se esconde tras Christine, la presentadora que se suicidó en directo y a todo color en la TV americana mientras daba las noticias en los años 70? El director Antonio Campos (Simon Killer) expone la imprevisible personalidad de esta mujer en un drama solvente interpretado por una fantástica Rebecca Hall (El Regalo, Vicky Cristina Barcelona) que se transmuta por completo en esta repelente periodista elaborando la que es, sin duda alguna, la mejor interpretación de su carrera. Con un look retro que nos transporta continuamente a los años 70 (sea por la música, el vestuario o sobre todo por el estudio de la cadena WXLT) la película apuesta por mostrar situaciones cotidianas de la vida de Christine dotándolas de elementos de locura transitoria y tristeza muy antipáticos y perturbadores.

La periodista se nos presenta como una mujer decidida y apasionada en su trabajo pero poseedora de una fuerza incontrolable que deja entrever sus problemas más íntimos.

Campos y Shilowich (quien hace un trabajo de campo exhaustivo e impresionante para crear una Christine lo más parecida al personaje real) parecen más abocados a señalar las razones de su acto que a dejarlo como un misterio sin resolver y por eso cada escena de la película se configura como una gota que llena el vaso hasta el trágico final. Christine se ha visto en los festivales de Sundance, Toronto y Londres y fue nominada a mejor primer guión en los Independent Spirit Awards.