20 de octubre de 2020, 21:04
Filmin estrena este viernes 16 de octubre un nuevo ciclo de películas que bajo el nombre de Nikkatsu Pinku Eiga ofrece una selección de títulos clave para entender el cine erótico japonés. En concreto, el ciclo se centra en aquellas obras producidas en los años 70 por el célebre estudio Nikkatsu, que bajo la denominación "Roman Porno" gozaron del favor del público y la crítica y han influenciado en directores como Quentin Tarantino o Sion Sono; y en la revisitación del género por parte de cinco directores contemporáneos que tuvo lugar en 2016.
Con motivo del 45 aniversario del ciclo original, Nikkatsu organizó el Roman Porno Reboot Project. Cinco reconocidos autores tendrían la misión de reactualizar el género bajo una serie de sugerentes premisas: Debía ser un homenaje o relectura de las esencias del Roman Porno, debía incluir una escena de sexo cada diez minutos y los personajes femeninos debían ser acordes a los nuevos tiempos.
Los cinco elegidos fueron Akihito Shiota, Kazuya Shiraishi, Hideo Nakata, Isao Yukisada y el citado Sion Sono, que con “Antiporno” lleva al límite las propias reglas del género clásico, haciendo una relectura totalmente demoledora y en clave feminista del Roman Porno original. El film, tan histérico como estimulante, relata la relación tóxica que mantiene una conocida y bella actriz con su asistenta, hasta que el director grita "¡corten!" y la película se rompe, escindiéndose en varias capas de delirio.
Con motivo del 45 aniversario del ciclo original, Nikkatsu organizó el Roman Porno Reboot Project. Cinco reconocidos autores tendrían la misión de reactualizar el género bajo una serie de sugerentes premisas: Debía ser un homenaje o relectura de las esencias del Roman Porno, debía incluir una escena de sexo cada diez minutos y los personajes femeninos debían ser acordes a los nuevos tiempos.
Los cinco elegidos fueron Akihito Shiota, Kazuya Shiraishi, Hideo Nakata, Isao Yukisada y el citado Sion Sono, que con “Antiporno” lleva al límite las propias reglas del género clásico, haciendo una relectura totalmente demoledora y en clave feminista del Roman Porno original. El film, tan histérico como estimulante, relata la relación tóxica que mantiene una conocida y bella actriz con su asistenta, hasta que el director grita "¡corten!" y la película se rompe, escindiéndose en varias capas de delirio.