La academia de cine estableció cuatro categorías de amplia representación: en la pantalla; entre el equipo de producción; en el estudio; y en cuanto a oportunidades de entrenamiento y progreso en otros aspectos del desarrollo y estreno de las películas.
Cada norma tiene subcategorías detallas. Para cumplir con la de representación en pantalla, un filme debe tener al menos un personaje protagónico o un personaje secundario prominente de un grupo étnico o racial infrarrepresentado, al menos 30% de los papeles secundarios de dos grupos infrarrepresentados, o que el argumento, tema o historia central se enfoque en un grupo infrarrepresentado. Según la academia, los grupos infrarrepresentados incluyen a mujeres, personas de color, personas que se identifican como LGBTQ+ o personas con discapacidades.
El premio a la mejor película, que reciben los productores del filme, es aquel por el que todos los miembros de la academia pueden votar. A principios de este año, la cinta surcoreana “Parasite” (“Parásitos”) se convirtió en la primera cinta en lengua no inglesa en alzarse con el galardón.
Todas las demás categorías mantendrán sus actuales requisitos de elegibilidad.
“La apertura debe ampliarse para reflejar nuestra población diversa global tanto en la creación de las películas como en los públicos que se conectan con ellas”, dijeron el presidente de la Academia David Rubin y la directora ejecutiva Dawn Hudson en un comunicado. “Creemos que estas normas de inclusión servirán como catalizadoras de un cambio perdurable y esencial en nuestra industria”.
La segunda categoría aborda el liderazgo creativo y la composición del equipo de producción. Para cumplir con las normas, una película debe tener al menos dos posiciones de liderazgo o jefes de departamento de un grupo infrarrepresentado, y al menos uno de ellos debe ser de un grupo racial o étnico subrepresentado; al menos seis miembros del equipo de un grupo racial o étnico infrarrepresentado; o al menos 30% del equipo de un grupo infrarrepresentado.
La tercera categoría tiene que ver con las pasantías pagadas y oportunidades de formación, así como las oportunidades de entrenamiento para trabajadores por debajo de la línea. La cuarta se refiere a la representación en los equipos de mercadotecnia, publicidad y distribución.
El formulario de inclusión será confidencial y no se exigirá para las aspirantes al Oscar a la mejor película de 2022 y 2023.
Las normas de inclusión fueron desarrolladas por un equipo especial encabezado por los gobernadores de la academia DeVon Franklin y Jim Gianopulos, con la asesoría del Sindicato de Productores de Estados Unidos. Estos también tomaron en consideración las nomas de diversidad usadas por el Instituto Británico de Cine y la Academia Británica de Cine y Televisión.
Los cambios tampoco afectarán la 93ra entrega anual de los Oscar, aunque la academia tuvo que hacer algunos ajustes debido a los efectos que la pandemia tuvo sobre la industria del cine, incluyendo postergar la ceremonia dos meses hasta el 25 de abril de 2021 y permitir que películas estrenadas en servicios de streaming compitan por el premio a la mejor película. The Telegraph