El Vecino es un cómic editado por Astiberri en el que se narran las andanzas de Javier y su álter ego Titán, en un tono mucho más costumbrista que heroico. Como con el Superlópez de Jan que ahora encarna Dani Rovira, El Vecino tiene también su cuota malagueña: Pepo Pérezes el dibujante de los tres tomos de este tebeo guionizado por Santiago García.
Hay que decirlo ya: El Vecino no es una historia de superhéroes al uso. Tampoco es una parodia de los tebeos de superhéroes, aunque haya homenajes por razones obvias. “No queríamos hacer una parodia, porque eso ya está hecho y está bien hecho. Obviamente, se genera muchas situaciones, equívocos, porque tiene que ocultar que es un superhéroe, pero es un motor de la acción”, explica Pepo Pérez.
Lo que cuentan García y Pérez es la historia de dos vecinos: Javier, el superhéroe, y José Ramón, un hombre en la mediana edad, gordo pero no demasiado, venido del pueblo en busca de un sueño: aprobar una oposición. De día, Javier tiene un ruinoso negocio de camisetas; de noche, es un superhéroe porque un día le cayó una alien sobre la cabeza y la transmitió sus superpoderes. A su alrededor circulan unos personajes más o menos comunes, más o menos raros, gente normal de una ciudad innombrada, mitad Málaga, mitad Madrid.
Tal y como explica el dibujante, el componente heroico aporta una dosis de fantasía que sirve de contrapunto, “a veces poético”, al tono realista de lo que se cuenta. Absténganse quienes pretendan encontrar en el cómic un alarde de superpoderes, porque a Javier no le vemos ni volar (y qué menos para un superhéroe). Todas las escenas en las que se supone a Javier /Titán surcando los cielos están resueltas con una elipsis.
El Vecino será Quim Gutiérrez
Puede que no se trate de un superhéroe en la línea de los de Stan Lee, pero la adaptación de El Vecino al cine o a la televisión era cuestión de tiempo. Astiberri ha publicado los tres tomos del cómic desde 2004, y cuenta Pepo Pérez que perdió la cuenta de cuántas intentonas ha habido para adaptarlo. Pero esta vez fue diferente: El año pasado Zeta compró los derechos para cine y televisión, y en un tiempo récord los autores del cómic se encontraron con la adaptación cerrada.
Zeta Producciones está detrás de las adaptaciones recientes de Anacleto: agente secreto, Superlópez, Zipi y Zape y la Isla del Capitán o Mortadelo y Filemón contra Jimmy el Cachondo.
Netflix entra en el proyecto
“En mayo tuvimos notificación de uno de los showrunners de que Netflix se había interesado, presentaron el proyecto y el equipo creativo y ya habían tanteado a Vigalondo”, explica Pepo Pérez. La presencia de Vigalondo (Los cronocrímenes, Colossal) es una garantía: “Sabemos que ha leído los cómics, los entiende, y aunque cambien la versión, los conceptos fundamentales los va a manejar”, explica a FilmAnd.
El desarrollo de la idea se hizo durante el verano, en otoño llegó la aprobación definitiva y ya ha concluido la preproducción. El rodaje empezará en marzo, con Quim Gutiérrez como protagonista y Clara Lago también en el reparto.
Eso sí, Pérez y García no participarán en la adaptación. Dice el dibujante que les han mantienen informados, pero nada más. “No tenemos cláusula de supervisión o veto, pero lo preferimos”, dice Pérez, que resalta que el lenguaje audiovisual no tiene que ver con el del cómic o la novela gráfica: “Se plantean otras necesidades de producción, que llevan a cambiar cosas. No es que te guste más de una forma a otra. Por ejemplo, el traje pasa de ser dibujado a ser real, y de ahí lógicamente van a derivar cambios. Yo prefiero hacerlo así”.
Lo que sabe de la adaptación le gusta, dice el ilustrador, que tiene también un alter ego. Es profesor de Derecho de la Universidad de Málaga y dibujante, aunque la mayoría de los alumnos no lo sepan. Es probable que la serie de Netflix le saque de ese anonimato relativo. En menos de un año, otro superhéroe español surcará las pantallas de la televisión. filmand.es