Como sucede año tras año, sean cuales sean las decisiones que la Academia tome, existe gente enojada. Ya sea por el poco respeto que una gran parte de cinéfilos tiene por dicha institución o porque sencillamente no ganó su película favorita, estas son fechas de debates y discusiones interminables sobre si los resultados fueron justos. Pues bien, aprovechando que internet sigue en llamas tras la última ceremonia, traemos aquí diez (realmente fueron once) películas que, según nuestra subjetiva opinión, debieron ganar el Oscar a Mejor Película en su año.
Aclaración importante: como uno de nuestros objetivos siempre ha sido difundir lo más posible un poco de la historia del cine, las diez películas que seleccionamos son de décadas distintas para dar más variedad. No seleccionamos películas de la década de 1920 o de la actual, 2020, debido a que en la primera solo se entregaron dos premios y la segunda aún no termina.
La Gran Ilusión (1938), dir. Jean Renoir
Aunque sabemos que a la Academia no le gusta premiar películas de habla no inglesa, La Gran Ilusión es un clásico mayúsculo. Una película divertidísima en donde podemos encontrar cuestionamientos bastante profundos a una Europa que se encontraba en los primeros pasos de la Segunda Guerra Mundial. Inteligente y provocadora, esta cinta ha sobrevivido el paso de los años a un nivel tal que absolutamente cualquier persona queda maravillada por ella, sea cual sea su edad.
Ciudadano Kane (1941), dir. Orson Welles
Sobran las palabras para hacer cualquier tipo de descripción de esta película, una de las más grandes de todos los tiempos precisamente porque llegó a revolucionar el juego con una infinidad de innovaciones, grabando así su nombre con letras de oro en la historia del séptimo arte. Aunque en la misma época tenemos otro clásico como El Gran Dictador de Chaplin, la ganadora de ese año fue Rebecca, una excelente película.
Un Tranvía Llamado Deseo (1951), dir. Elia Kazan
Década difícil de decidir. A pesar de que tal año ganó Un Americano en París de Vincent Minelli, el impacto cultural que tuvo en su momento nuestra cinta seleccionada, con un impactante Marlon Brando, nos hace pensar que hubiese sido mejor elección. Otra película incluso superior a esta en nuestra opinión, que tampoco se llevó el galardón fue Sunset Boulevard, aunque como Eva al Desnudo ganó dicho año, nos quedamos con nuestra recomendación.
¿Quién Teme a Virginia Woolf? (1966), dir. Mike Nichols
Esta elección fue muy sencilla. Una de las películas más apasionantes de la historia. En ¿Quién Teme a Virginia Woolf?, nos encontramos con un drama total dominado por cuatro actores en escena que se comen la pantalla entregándonos actuaciones memorables a través de una historia de esas que dejan a todo el mundo con la boca abierta. Como dato curioso, esta fue la segunda película en ser nominada a 13 Oscars, todas las categorías posibles, aunque al final terminó por llevarse solo cinco estatuillas.
Apocalipsis Ahora (1979), dir. Francis Ford Coppola
Si la anterior fue fácil, en esta fue todo lo contrario ya que no existe tarea más difícil que elegir una para los 70 cuando una infinidad de clásicos como La Naranja Mecánica, Cabaret, Chinatown, Barry Lyndon, Dog Day Afternoon, Taxi Driver, All That Jazz y unas cuantas más no se llevaron el máximo galardón. ¿Entonces por qué Apocalypse Now? No solo porque es una de las obras definitivas del séptimo arte con un impacto cultural enorme, sino también porque la ganadora de ese año, Kramer vs. Kramer, a pesar de ser una muy buena película no se le acerca a los talones a este monstruo del cine. Frenética y visualmente impresionante, esta es una obra que hay que ver y aplaudir.
Toro Salvaje (1980), dir. Martin Scorsese
Aunque ese año compitiera también con otra gran película como Elephant Man de David Lynch, resulta extraño ver que la Academia le haya dado el premio a Ordinary People de Robert Redford en vez de a Toro Salvaje, una cinta magnífica en donde somos guiados por un brutal Robert de Niro por la vida de Jake la Motta, un boxeador que tras tocar el cielo descendió a los infiernos enseguida por culpa de sus malas decisiones.
Fargo (1996), dir. Hermanos Coen
Aunque estuvimos tentados a elegir a Pulp Fiction, esta perdió contra Forrest Gump, por lo que nos iremos con el clásico moderno de los hermanos Coen, en donde asistimos a una historia de misterio en donde la tensión no desaparece nunca y los giros dramáticos son simple y sencillamente espectaculares. ¿La ganadora de ese año? El Paciente Inglés, una película a la que el paso del tiempo no le ha hecho ningún bien.
El Pianista (2002), dir. Roman Polanski
Comencemos diciendo que esta fue una década complicada ya que las decisiones nos parecen en su mayoría bastante acertadas ya que, aunque grandes películas se quedaron con las manos vacías, en muchas ocasiones sus competidoras fueron mejores. En 2002, Chicago, un musical brillante, se alzó con la estatuilla, y aunque reconocemos su mérito con aplausos, la obra de Roman Polanski tenía argumentos para defenderse. Una película muy emotiva con un mensaje esperanzador ambientada en una de las épocas con menos luz de la humanidad con un Adrien Brody espectacular.
Empate entre Amour (2012), dir. Michael Haneke y El Hilo Fantasma (2017) dir. Paul Thomas Anderson
Fue imposible decidirse por una sola, y aunque amemos a las ganadoras de dichos años —Argo de Ben Affleck y La Forma del Agua de Guillermo del Toro—, estas son películas que fácilmente entran dentro de cualquier lista de las mejores de la historia. Si bien entendemos que no son obras precisamente “hollywoodescas”, el nivel artístico que contienen es de otro mundo, ambas tan desgarradoras como impresionantes.
Pues bien, esas fueron nuestras diez (once) elecciones, ¿tú cuáles hubieses elegido? Háznoslo saber en los comentarios.