CRÍTICA
El pasado 11 de febrero Cristian de Moret presentó en la Sala Clamores de Madrid su nuevo disco, Caballo Rojo. Un trabajo en el que el artista onubense vuelve a experimentar con los sonidos del flamenco y del rock al tiempo que también profundiza en su particular mundo poético y sonoro.
El artista salía a escena sobre las 22:30 con una sala llena y con un público con muchas ganas de dejarse llevar por su particular estilo musical. Desde los primeros compases Cristian de Moret sorprendió con esas peculiar voz rasgada y aflamencada que tan buenos resultados le dio en su anterior disco, Supernova. Un estilo que rompe con los parámetros clásicos del flamenco fusión y rock y que supone una nueva perspectiva dentro de los nuevos sonidos que actualmente triunfan con grupos como Derby Motoreta’s Burrito Kachimba o La plazuela. Sonidos que, como recordó en varios momentos, en gran parte se los debemos al gran Enrique Morente.
La emblemática Sala Clamores se convirtió en una mezcla de tablao flamenco y concierto de rock en el que fueron sonando canciones como Veneno, Magia negra, Geometría sagrada o El pañuelo. Temas que, como explicó en varios momentos, beben directamente del flamenco y de su amor por la cultura andaluza, pero que están fuertemente influenciados por sonidos tan radicalmente distintos como Queen of The Stone Age o Radio Head. De esta manera no es raro que Cristian de Moret mezcle los sonidos de unas Alegrías de Cádiz con la fuerza sonora y radicalidad de las melodías de los Foo Figthers, los riffs de guitarra al más puro AC/DC
O los sonidos funk. Incluso la bachata tiene cabida en su repertorio.
Fueron dos horas de concierto en los que el cantante de Huelva se le vio contento y muy conectado con el público. Uno de los grandes momentos de la noche llegó con su ya clásico Ya se apaga, quizás uno de los mejores temas de nuevo disco para entender su estilo y particular flamenco fusión. Tampoco faltó su homenaje a Camarón y a La Leyenda del tiempo, con una versión mucho más roquera y electrónica de lo habitual.
Y así, tras tocar gran parte de su repertorio, el concierto cerro con su versión del Hotel California de los Eagles. Versión muy flamenca (y bastante sorprendente) de unos de los grandes clásicos de la música americana.
En definitiva, un concierto muy interesante de un artista lleno de pasión y duende que sabe transmitir muy bien su amor por la cultura flamenca. Caballo Rojo es todo un regalo en este 2023. Habrá que seguir muy de cerca a Cristian de Moret.
