Pau Faus
Barcelona, 1974. Artista visual, licenciado en arquitectura y director de los cortometrajes La ciudad jubilada, Entre bastidores y Pedagogy; y del mediometraje Sí se puede. Siete días en PAH Barcelona (2014). Consciente de la excepcionalidad del fenómeno de Barcelona en Comú, Faus decide acompañar a Ada Colau en este vertiginoso viaje, que la conduce en menos de un año de la lucha a pie de calle hasta la alcaldía de Barcelona.
¿Fue difícil el acceso a la figura de Ada Colau?.
Pau: Partíamos con la ventaja de que ya la conocíamos desde los tiempos en los que había estado en las PAH e incluso llegamos a rodar un documental donde ella ya participaba (se refiere a Sí se puede. Siete días en PAH Barcelona, 2015). Desde un principio se nos dio todo tipo de facilidades para llevar a cabo el documental, aunque tenemos claro que tuvo mucho que ver el hecho de que ya existiera una previa mutua confianza. Estábamos convencidos, como así fue, de que la idea del documental le parecería bien.
Lo único que le dejamos claro desde un principio es que lo queríamos rodar en tiempo presente. Si hubiéramos dejado pasar el tiempo las cosas serían distintas y queríamos captar la importancia del momento para poder pillar todos los matices que pudiéramos.
¿Por qué crees que Ada Colau logró alcanzar el objetivo de ser alcaldesa de Barcelona?
Existe un aprendizaje básico que tuvo lugar en las PAH (Plataforma de Afectados por la Hipoteca) y que tomó como base la épica de la cotidianeidad. Ella representa a muchas personas que se identifican con ella y con su forma de pensar. Ada es una persona a la que no le cuesta reconocer sus dudas, es más, de ahí surge parte de su fuerza, y eso conecta con la gente, con lo cotidiano. A parte estamos ante un ejemplo claro de la regeneración que uno se cree. Su mensaje transmite coherencia en su origen y en lo que posteriormente se dice, algo que por desgracia no suele prodigarse en el mundo de la política.
¿Cuál es tu momento favorito del documental?.
Los momentos en los videodiarios en los que éramos espectadores privilegiados de sus distintas reacciones, de su introspección y sus pausas, instantes muy efímeros pero que decían mucho de la persona. Eran situaciones en las que lanzaba una serie de reflexiones que ni siquiera te habías llegado a plantear. Realmente fuimos espectadores de lujo de este viaje.
También disfruté mucho con la escena final, la de la llamada de Trías para felicitarle una vez se supo con seguridad que había resultado ganadora de las elecciones. Llevábamos cuarenta minutos grabando y fue como la guinda del pastel. Ahí te das cuenta de la importancia que tiene estar en el sitio justo en el momento oportuno.
¿Os implicasteis mucho en todo el proceso desde la fundación del partido hasta la victoria en las municipales?.
Digamos que éramos como actores y Ada Colau era nuestra estrella principal. Como ya la conocíamos de hace tiempo, también estuvimos colaborando en distintos reportajes donde se hablaba de Barcelona en Comú en general y de la campaña electoral en particular. Hubiera sido difícil realizar el documental sisn sentirnos ideológicamente implicados con la masa colaboradora. Estábamos tan implicados que en ocasiones ni tan siquiera grabábamos.
A parte de lo que se muestra en el documental, quedó mucho material sin editar?.
El tono del videodiario marca el tono de la película. Las situaciones conflictivas se dieron más al principio, en las distintas frustraciones por las mismas vicisitudes y dificultades del proceso. Más adelante la propia ilusión por lo que se estaba consiguiendo aparcó de alguna manera cualquier tipo de enfrentamiento, y eso se nota mucho en los citados videodiarios, que se convierten en un espacio de reflexión y no de lucha.
¿Si Ada Colau no hubiera ganado las elecciones, se hubiera podido llevar a cabo el documental?.
Hombre, a lo mejor hubiéramos encontrado algún que otro obstáculo y la participación hubiera sido menor, pero nosotros teníamos claras cuáles eran nuestras intenciones desde un principio: partir de un argumento básico, como era el de la lucha del fuerte contra el débil, y a partir de ahí ver como nuestro personaje desde la humildad y el trabajo se iba haciendo cada vez más grande hasta conseguir sus objetivos. Lo cierto es que cuando empiezas una tarea como esta no te preguntas donde va a a estar el límite, hasta qué punto la protagonista va a llegar a desnudar su intimidad.
¿Ada Colau ha podido ver el documental?
Ella lo pudo ver hace dos meses en Barcelona. Su reacción fue muy parecida a la que iba teniendo mientras rodábamos. Se emocionó en los momentos más emotivos y se sintió incómoda en aquellas circunstancias en las que no se llegó a encontrar del todo a gusto. Pero en general le gustó bastante el resultado final.
