Abriendo con un historia corta de refugiados a través de un montaje con material de archivo y animaciones, con La llegada de un tren a la estación de los hermanos Lumière editada en paralelo con imágenes de trenes cargados de refugiados de la crisis actual, el documental híbrido holandés Stranger in Paradise nos dice en ese mismo instante qué postura adopta: aquellos que huyen se llaman “Sureños”, y aquellos que más o menos les dan la bienvenida se llaman “Norteños”.
La ópera prima del director holandés Guido Hendrikx (cuyo corto que trataba la pedofilia, Among Us, recorrió el circuito de festivales en 2014) entonces empieza con un riguroso ejercicio. Casi toda la película tiene lugar en una clase, donde el profesor (interpretado por el actor Valentijn Dhaenens, visto por última vez en Waldstille [+]) da la bienvenida a dos grupos de solicitantes de asilo, refugiados de África y Oriente Medio. Con una posición de autoridad, el profesor les explica de manera dura y sin rodeos cómo los ven los europeos: como visitantes innecesarios y posiblemente una amenaza para su modo de vida.
Al siguiente grupo le toca un profesor más optimista y compasivo, uno que les explica cómo gente tan valiente como ellos es necesaria en Europa, y cómo la economía mundial crecería si no hubiera fronteras en el mundo. Pero esta fantasía (hay una escena en la cinta en la que el profesor les dice a sus “alumnos” que imaginen este mundo, que cierren los ojos y contemplen esta idea maravillosa) no puede durar mucho. La siguiente fase, más emotiva, empieza: las entrevistas.
En un plano fijo y de perfil, Hendrikx nos muestra al profesor sentado en una mesa, interrogando a los sujetos de uno en uno de forma firme y calmada y decidiendo, quién se puede quedar y quién no, según la ley holandesa. Explica en términos simples cuáles son las razones de las decisiones, que casi nunca tratan sus problemas específicos. Estas personas solo son números para las administraciones europeas. ¿Puedes adivinar cuántos obtienen una respuesta positiva de las casi dos docenas que tenemos la oportunidad de conocer?
Mientras que el profesor es solo un papel, interpretado con gran dedicación por Dhaenens, los refugiados son reales, y se les dijo que esto era un mero ejercicio. Pero las emociones en sus caras, los argumentos que tienen para sus casos, sus sueños y sus deseos son tan reales como si fuera un proceso de selección real.
Stranger in Paradise es una declaración valiente, una mirada inquebrantable a uno mismo para ambos, los europeos y los (in)deseados invitados. El primero verá una imagen desagradable y egoísta y el último una profundamente desalentadora.
La cinta es una especie de extensión natural de la ola de películas que tratan el tema de los refugiados. No tiene la humanidad de Fuego en el mar [+] ni el optimismo de 69 Minutes of 86 Days [+], pero tampoco la desesperación de Last Men in Aleppo [+]. Lo que sí que tiene es coraje y, más importante, honestidad.
Después de su estreno mundial en el IDFA, donde ganó el premio a mejor documental holandés, Stranger in Paradise se exhibió en 25 festivales, llevándose galardones en Tirana, Tiflis y Madrid, entre otros eventos. También ganó el Premio Hera a los “Nuevos Talentos” en el reciente Biografilm Festival de Bolonia, Italia (leer noticia). Está producida por Zeppers Film en coproducción con VPRO, y Cat&Docs tiene los derechos internacionales. Cineuropa.